Abogados especialistas en despidos

En Lexidy somos especialistas en reclamaciones de despidos, con más de 8 años de experiencia y los mejores abogados laboralistas. 

Contáctenos

Para solicitar una consulta de caso gratuita, por favor proporciónenos sus datos de contacto a continuación y nos pondremos en contacto con usted a través de correo electrónico o teléfono.

¿Cómo pueden ayudarte nuestros abogados?

Nuestros abogados laboralistas de Lexidy pueden ayudarte en tu caso de despido en España de diversas maneras:

  1. Asesoramiento inicial: Podemos proporcionarte asesoramiento legal experto desde el principio, explicándote tus derechos y opciones legales en caso de despido.

  2. Revisión del caso: Analizaremos en detalle tu situación laboral y los motivos de tu despido para determinar si se ha producido alguna irregularidad o si se han vulnerado tus derechos laborales de acuerdo con la legislación española.

  3. Representación en negociaciones: Si lo consideras conveniente, nuestros abogados pueden representarte en las negociaciones con tu empleador, buscando un acuerdo justo que pueda evitar un litigio o resolver el conflicto de manera amistosa.

  4. Asistencia en procedimientos legales: En caso de que no se pueda llegar a un acuerdo extrajudicial, nuestros abogados te representarán ante los tribunales laborales españoles, llevando a cabo todas las acciones legales necesarias para impugnar el despido y defender tus derechos.

  5. Defensa en juicio: Durante el proceso judicial, te podremos brindar una sólida defensa legal, presentando pruebas, argumentos y estrategias legales para respaldar tu caso y buscar una resolución favorable.

¿Cómo sé si puedo reclamar el despido?

Durante una primera consulta gratuita, evaluamos la viabilidad de la reclamación por despido al informarte sobre las posibilidades de que la terminación sea considerada como improcedente o nula. También discutiremos si sería más beneficioso buscar un acuerdo y negociar una compensación por despido. Asimismo, examinaremos si se ha violado algún derecho fundamental, en cuyo caso, además de reclamar un despido nulo con derecho a ser reincorporado y recibir los salarios pendientes, buscaremos una indemnización por daños morales.

Existen dos categorías de despidos individuales: el despido disciplinario y el despido objetivo. El despido disciplinario se basa en faltas o incumplimientos graves por parte del trabajador, mientras que el despido objetivo se fundamenta en causas objetivas establecidas por la ley, como razones económicas, técnicas, organizativas o productivas, entre otras contempladas en el Estatuto de los Trabajadores.

Cualquier despido disciplinario o objetivo puede ser clasificado como procedente, improcedente o nulo.

La acción legal para impugnar un despido puede manifestarse mediante una demanda por despido nulo o una demanda por despido improcedente.

En caso de que se declare un despido nulo, la empresa está obligada a readmitir al trabajador en su puesto anterior y abonarle los salarios devengados desde el momento del despido hasta la sentencia.

Si se determina que el despido es improcedente, la empresa tendrá un plazo de 5 días para elegir entre las siguientes opciones:

  • Abonar a la persona trabajadora una indemnización equivalente a 33 días por año de servicio, con un tope máximo de 720 días de salario (hasta el 12/02/2012, 45 días por año de servicio, con un límite máximo de 42 mensualidades de salario).
  • Reintegrar a la persona trabajadora en su puesto original y compensarle los salarios pendientes devengados desde el momento del despido hasta la fecha de la sentencia.

En el caso de una demanda por despido de un trabajador con contrato fijo discontinuo, la particularidad radica en el cálculo del tiempo de servicio, el cual debe considerar únicamente los períodos de actividad laboral, excluyendo aquellos en los que no ha habido actividad.

En ocasiones, la posibilidad de obtener un veredicto favorable en un juicio no es clara. En tales casos, una opción recomendada es buscar una conciliación mediante un acuerdo y negociar una compensación por despido, con el objetivo de obtener el mejor resultado posible para el cliente.

Un despido se considera procedente cuando se valida ya sea por la falta de presentación de una reclamación por despido, por el reconocimiento del trabajador en un posible acuerdo, o por una sentencia judicial que lo declare como tal.

Es fundamental tener en cuenta que el plazo para ejercitar acciones de reclamación por despido es de 20 días hábiles. Transcurrido este tiempo, la posibilidad de tomar acciones legales por el despido expira y ya no sería factible iniciar una reclamación. 

Por lo tanto, frente a un despido, es aconsejable buscar asesoramiento legal especializado lo más pronto posible. Contáctanos ahora para ver tu caso en una consulta gratuita y reclamar tu despido improcedente!

Contáctenos

Para solicitar una consulta de caso gratuita, por favor proporciónenos sus datos de contacto a continuación y nos pondremos en contacto con usted a través de correo electrónico o teléfono.

Lo que nuestros clientes dicen

Únete a la creciente comunidad de clientes en España y gestiona tu caso de despido con nuestra ayuda.

Preguntas Frecuentes

En España, los tipos de despido más comunes son el despido disciplinario y el despido objetivo.

 

El despido disciplinario ocurre cuando el empleador termina el contrato laboral debido a una falta grave o incumplimiento por parte del trabajador, como el robo, el absentismo injustificado o el acoso.

El despido objetivo se basa en causas objetivas establecidas por la ley, como razones económicas, técnicas, organizativas o productivas.

Los derechos del trabajador en caso de despido incluyen el derecho a ser informado de los motivos del despido, el derecho a recibir una indemnización o ser readmitido en el puesto de trabajo, según corresponda.

El plazo para impugnar un despido en España es de 20 días hábiles a partir de la fecha de notificación del despido.

Si no se impugna el despido dentro del plazo establecido, se considera que el despido es firme y no se puede reclamar más tarde.

Si un despido se declara improcedente, el empleador puede optar por readmitir al trabajador en su puesto de trabajo anterior o pagar una indemnización equivalente.

En caso de un despido injustificado, el trabajador puede presentar una demanda ante los tribunales laborales para impugnar el despido y buscar una compensación adecuada.

 

Un despido nulo es aquel que se considera contrario a la ley o a los derechos fundamentales del trabajador. En estos casos, el trabajador tiene derecho a ser readmitido en su puesto de trabajo y a recibir los salarios de tramitación.

  1.  

Ante un despido, es importante que el trabajador busque asesoramiento legal especializado lo antes posible para conocer sus derechos y opciones disponibles. También es crucial recopilar toda la documentación relevante relacionada con el despido.

 

Nuestros Abogados Laboralistas

“Asistir a los clientes en este campo es siempre un desafío de gran importancia, ya que estamos tratando con sus expectativas. Por lo tanto, nos aseguramos de proporcionar siempre el mayor cuidado y enfoque en nuestras soluciones, para encontrar la oportunidad adecuada para proteger sus intereses.”